Noticio de Diario Vasco de Miércoles, 29 de Diciembre de 2006
El desembarco frisón
Una decena de alemanes conquistó ayer la Isla de Santa Clara en un peculiar ritual que se repite el día de los Santos Inocentes
Vannesa Arcelus
Los donostiarras que pasearon ayer durante la mañana por los alrededores del puerto de San Sebastián fueron principales testigos de una peculiar invasión de la Isla de Santa Clara.
Hacia las 11 de la mañana una decena de alemanes, concretamente frisones, embarcaron rumbo a la isla con el firme propósito de recuperar el territorio aludiendo que «declaramos nuestros derechos sobre la isla».
Pero no se alarmen, la curiosa invasión no era más que un ritual que este grupo de alemanes afincados en San Sebastián llevan realizando el día de los Santos Inocentes de los últimos tres años.
La idea de la conquista surgió hace unos años cuando unos amigos de Hans, uno de los invasores y único frisón original, bromeaban sobre el tema del islote de Perejil, una cuestión que a Hans le pareció «ridícula» pero que fue el motor para iniciar esta tradición que seguirán realizando como afirmaban «si se junta más gente». Esto sumado al hecho de que los frisones mantuvieron relaciones comerciales con la ciudad, animaron al grupo a realizar esta pequeña parodia que llamó la atención de los donostiarras y turistas que paseaban por el puerto.
La elección de la fecha aludía al carácter de broma de la invasión y «para quitar problemas con la legión», explicaba Hans.
La invasión consistió en un viaje en bote hasta la Isla donde desembarcaron e izaron la bandera frisona, que peculiarmente es muy parecida a la donostiarra.
Tras la conquista, Hans y el resto de su grupo se dirigió a una conocida sociedad de la Parte Vieja para degustar una comida típica frisona que pone el punto final, por este año, a la invasión de la isla donostiarra.
Noticio de Diario Vasco de Miércoles, 29 de Diciembre de 2006